La publicidad oficial ha sido denunciada como un mecanismo de censura, utilizada por gobiernos y empresas estatales para premiar o castigar a los medidos de comunicación según su línea editorial. La falta de criterios claros y objetivos y su asignación discrecional vicia, según ARTICLE 19 y Fundar, la relación entre medios y gobierno, sobretodo a nivel local.
La pauta o publicidad oficial es uno de los canales de comunicación con los que el Estado cumple, en una democracia, con su “obligación de informar a las y los ciudadanos sobre los servicios que presta, las políticas públicas que instrumenta y las actividades oficiales que les afectan o benefician”.
Para compartir experiencias y hablar de buenas prácticas sobre este tema, estas dos organizaciones no gubernamentales organizaron el foro “Publicidad oficial en América Latina: de la censura a la información”, que tuvo lugar el día de ayer en el Hotel Imperial de la Ciudad de México. Esto como punto de partida para impulsar una legislación en el país que regule la asignación publicitaria por parte de los gobiernos municipales, estatales y federal con base en las recomendaciones de organismos internacionales de libertad de expresión.
La pauta o publicidad oficial es uno de los canales de comunicación con los que el Estado cumple, en una democracia, con su “obligación de informar a las y los ciudadanos sobre los servicios que presta, las políticas públicas que instrumenta y las actividades oficiales que les afectan o benefician”.
Para compartir experiencias y hablar de buenas prácticas sobre este tema, estas dos organizaciones no gubernamentales organizaron el foro “Publicidad oficial en América Latina: de la censura a la información”, que tuvo lugar el día de ayer en el Hotel Imperial de la Ciudad de México. Esto como punto de partida para impulsar una legislación en el país que regule la asignación publicitaria por parte de los gobiernos municipales, estatales y federal con base en las recomendaciones de organismos internacionales de libertad de expresión.
México D.F., 7 de octubre de 2010 Cencos.
.
No hay comentarios:
Publicar un comentario